EL 2do. CUADRANGULAR DE BALONCESTO LA RESTAURACION 2013, EL CUAL ESTUBO DEDICADO AL LIC. MOISES RODRIGUEZ, CON EL GRAN PODER DE DIOS POR DELANTE FUE UN EXITO. GRACIAS A LOS CLUBES PARTICIPANTES Y ESPERAMOS QUE EL PROXIMO AÑO SE UNAN MAS CLUBES Y LIGAS HERMANAS

lunes, 8 de febrero de 2010

HORFORD; UN JUGADOR QUE TODO EL MUNDO QUIERE

Quizás su nombre no sea tan familiar como el de los consagrados Lebron James, Kobe Bryant, Carmelo Anthony y compañía, luminarias de NBA, pero no cabe duda que el dominicano Al Horford es una clase de jugador con el que cualquier equipo quisiera contar. El pivot de los Hawks de Atlanta fue seleccionado días atrás como uno de los suplentes que participará en el equipo de la Conferencia del Este, en el Juego de Estrellas, que tendrá lugar este domingo, en el Cowboy Stadium, en Dallas.


Un premio a la constancia, entrega deportiva y labor tesonera. De hecho, Horford, de 23 años y 2,08 metros, nativo de Puerto Plata, es apenas el tercer latino que actuará en la historia del choque estelar y el cuarto hispanoparlante, para seguir los pasos del panameño Rolando Blackman, el argentino Emanuel Ginóbili y el español Pau Gasol, quien ahora fue seleccionado por tercera ocasión al clásico.


Desde que Horford llegó a Atlanta, como tercera selección del draft de la NBA en 2007, se estableció como sólido rebotero, pese a dar ventajas ante jugadores que le superan en corpulencia y altura. Su impacto fue tal que ya el club suma dos participaciones corridas en postemporada y hoy está entre los cuatro primeros del Este.


Horford, quien exhibe promedios de 13,4 puntos, 9,5 rebotes y 2,1 asistencias por juego, amén de un 56,4% de acierto en tiros de campo, es hijo del ex jugador de la NBA, Tito Horford y de la periodista deportiva Arelis Reynoso, quien es además su representante.

"Empecé a jugar baloncesto por mi padre. Verlo me motivó", dijo en una entrevista. Sin embargo, fue Arelis quien le encaminó. Lo inscribió en distintas escuelas en Dominicana y en 2000 lo envió a Michigan, donde vivía su padre. La escuela secundaria Grand Ledge le recibió y pronto se convirtió en una atracción.

Eso le abrió las puertas para inscribirse en varias universidades, pero prefirió el programa de Florida, porque su mamá trabajaba en ese estado como comentarista de televisión. Incluso, Al tomó la carrera de periodismo por la admiración a su trabajo. Fue así como llevó a los Gators a dos campeonatos nacionales, en 2006 y 2007, antes de dar el salto a la NBA. El resto, ya es historia.

Horford tiene como su carta de presentación a la defensa. Justo en una entrevista, a principios de esta zafra, reconocía que "sé lo que tengo que hacer con el equipo, defender, tomar rebotes y bloquear tiros".

Pero el basquetero de 111 kilogramos quiere más y con el tiempo mejorará su ofensiva. Está trabajando para ello, aunque a fin de cuentas, a él lo que le importan son las victorias. Esas que están viniendo, mientras se acerca la hora del Juego de Estrellas. Allí también mostrará su talento.