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SANTO DOMINGO.-- El equipo de República Dominicana que irá al Premundial de Baloncesto que se jugará en San Juan, Puerto Rico, del 26 de este mes hasta septiembre 6, tiene muchos nombres pero para el dirigente Julio Toro eso no es suficiente.La filosofía del exitoso técnico boricua se sustenta en el juego en equipo, fundamental en el baloncesto y donde los mejores no son los que más anotan, sino los que menos permiten que le anoten y facilitan el juego a sus compañeros.
Toro, en un receso de la primera de dos prácticas celebradas ayer en La Arena del Cibao Oscar Gobaira, se definió como un dirigente que pregona el “espíritu de grupo, la creatividad, cuya mayor alegría es que el jugador mejore y sólo trata de ayudar a que ellos mismos se ayuden”.
Insistió en que el baloncesto “todos somos partes de un guión, donde todos tenemos diferentes funciones, que hay que cumplirlas para que las cosas salgan bien y es lo que esperamos”. En adición, cree más en el hacer que en el creer “y por eso, esperamos por los resultados que llegarán después del 26”.
Resaltó, no obstante, lo que representa tener y disponer en cualquier equipo tres jugadores de la categoría de Alfred Horford, Francisco García y Charlie Villanueva y más con la dedicación e identificación mostrada por ellos”.
El superar a Puerto Rico, si se quiere fácil, por más de 10 en ambos partidos de exhibición, hacer sentir contento al estratega del escuadrón dominicano al Premundial, pero no realizado. “Aceptamos los partidos y esos resultados pero ya no cuentan, se borraron, los que valen son del 26 en adelante”, expuso.
Si alguien del ámbito baloncelístico aún tiene preocupación en relación a lo que siempre ha parecido ser el “talón de Aquiles” del representativo nacional, la posición 1, la de armador, Toro ofrece noticias reconfortantes.
Hay cinco hombres con capacidad de ejercer esa función, tres titulares: Kelvin Peña, Juan Coronado y Carlos Morbán (el orden no importa), así como Luis Flores y Jeff Greer, en lo que definió el plan B.
"Tenemos tres jugadores muy talentosos (Peña, Coronado y Morbán), tres diamantes. Jóvenes, con buena genética, veloces, saltarines y con buen lance y Flores y Greer, también pueden hacer el trabajo”, argumentó el técnico boricua, orgulloso de la oportunidad que se le brinda en el país.
Toro, pese a todo lo que ha podido ver y tener en baloncesto, quizás por cómo le llegó la contratación y el momento, se muestra emocionado y animado por las expectativas creadas por el escuadrón dominicano y el caudal, según él, de posibilidades.
“Cada día más se integran, mejor se comprenden y la versatilidad sale a relucir. La mayor impresión que he tenido es la ética de trabajo, disposición, cooperación y responsabilidad tras el objetivo o misión que tenemos por delante”, enjuició al momento de destacar que “no existe la palabra cansancio y cada práctica es como si fuera un campo de batalla amistoso, todos entienden su responsabilidad”.