Seamos realistas: No hace tanto tiempo, cuando pensábamos en el básquetbol universitario, no se nos venían a la mente nombres como Davidson y Liberty. Nos tomó trabajo enterarnos de que una de esas universidades estaba en las cercanías de Charlotte, N.C., y que la otra es una ciudad de Virginia con el complicado nombre de Lynchburg. Ninguna de las dos universidades había sido una verdadera competidora por el campeonato nacional -- Davidson no figuraba dentro del top 10 desde 1969 (y Liberty sólo había jugado en la División I en 1988).
Al menos, así había sido hasta ahora.
Hoy en día, Davidson se jacta de contar con Stephen Curry. A unas pocas horas de allí esta otro Curry, un hermano más joven llamado Seth, quien podría terminar este año como el líder en anotaciones en su primer año.
Y detrás de estos jugadores está su padre, Dell -- quien muy probablemente mirará la performance de sus dos hijos por ESPN este fin de semana --, con un currículo de 16 años de carrera profesional en el básquetbol, buen francotirador y con un ADN que haría que cualquier atleta se sonroje de orgullo.
"Sinceramente, no lo puedo negar", dijo el mayor de los Curry, poco tiempo antes de que Stephen y sus compañeros reciban al No. 22 Butler (ESPN, al mediodía ET), y de que Seth ayude a su equipo a enfrentar a Old Dominion (ESPNU, 11 a.m. ET). "Debo admitir que me siento pleno.
Obviamente, es un sueño hecho realidad otra vez para mí. Mi sueño era jugar en la NBA, y ahora tengo dos hijos que aman este deporte tanto como yo. Me siento como mis padres me dijeron que se sentían cuando yo estaba en la universidad. Disfrutaré de esto mientras pueda".
Curry tendrá mucho tiempo. Sus muchachos darán que hablar durante un largo período.
Para aquellos que no han visto jugar a Stephen Curry, él es el hombre que parece decir, "¡Maldición! No puedo creer que me perdí ese tiro" cada vez que hace uno. Curry es el que consiguió 40 sobre Gonzaga en la primera ronda del torneo NCAA, la primavera pasada. Es quien llevó a Davidson a la final regional del Medio Oeste antes de que perdieran ante Kansas, equipo que terminó siendo el campeón nacional. Es el asesino con cara de inocente que cuenta con tiros de largo alcance y que ha promediado 29 ppp con los que selló su posición entre los mejores jugadores del básquetbol universitario.
Y según se comenta, su hermano menor, Seth, quien ha promediado 20.6 puntos en 28 partidos durante su primer año universitario, podría ser aún mejor que su hermano.
No existen otros hermanos en el básquetbol que puedan jugar en un buen nivel y que además sean francotiradores puros capaces de sumar ante cualquier oponente. Puede que estemos ante la primera familia de básquetbol universitario.
"Es muy loco", dijo Stephen, ignorando el status exitoso, la imagen impecable y el estilo de familia Obama que los Curry han demostrado tener. "Nunca esperé escuchar algo así. Estoy muy orgulloso de mi hermano. Todos esperaban que sea conocido como el hijo de Dell Curry o el hermano menor de Stephen, pero él se hizo de un nombre propio. Espero que los dos podamos seguir mejorando. No sé qué más puedo decir.
Dell Curry no quiere hablar de la primera familia del básquetbol. A pesar de sus quejas y de las de su esposa, Sonya, el hecho de que pocas familias han recibido tanta atención desde que Archie, Peyton y Eli Manning fueron la familia del fútbol americano. La cuestión es que las expectativas que hubo con relación a los Manning no se cumplieron hasta que Peyton y Eli ganaron Super Bowls consecutivos.
Stephen fue un jugador secundario en Virginia Tech, alma mater de su padre. Una universidad tras otra dejó pasar a Seth, a pesar de la presencia de Duke y North Carolina muy cerca.
"Está bien", dijo Seth. "Estoy contento de haber terminado exactamente en donde estoy hoy. Tuve la oportunidad de jugar de inmediato y mi entrenador es excelente. Estoy sacándole el jugo a mi oportunidad. Y sí, intentando cumplir con las expectativas que mi hermano fijó después del gran año que tuvo".
"Seth es un jugador especial", dijo el entrenador de Liberty, Ritchie McKay. "Somos un mejor equipo gracias a él. Es muy especial. Lo supe desde el momento en el que lo vi jugar por primera vez. Camina, habla y lanza como su padre -- y en la base lo supera.
"Lo mejor de todo, es que aunque Stephen es un poco más extrovertido, son muy parecidos. Son personas excelentes con un muy buen carácter. No solo quieren hacer las cosas bien, las quieren hacer de inmediato. Son personas especiales y estoy muy contento de que uno de ellos esté jugando para mí".
A los dos hijos se los considera mejores jugadores que su padre. Ese es un elogio sin igual. Piensa en los francotiradores puros de este deporte desde Jerry West, Larry Bird y Freddie Brown hasta los de hoy, Ray Allen y Michael Redd. Cuando hablas de los mejores diez francotiradores de la historia de la NBA, el nombre de Dell Curry debe ser mencionado.
"Eso es un alago, pero ver jugar a mis hijos es aún mejor. Imaginar que podrían llegar a ser mejores que yo es una bendición. No puedo pedir más. Con mi esposa lo hablamos de vez en cuando. No puedo expresar con palabras lo afortunados que nos sentimos".
No son los únicos que se sienten así. En Davidson y en Liberty el sentimiento es el mismo.
Y, por supuesto, nosotros también estamos muy contentos de que así sea.