ORLANDO, Fla.-- El ataque gana partidos, la defensa campeonatos.
Qué mejor momento para decir ahora esa frase célebre, después de la exhibición sin pelota de los flamantes campeones ante el Magic, en el Juego 5 de las Finales.
¿Por qué ganaron los Lakers? Porque entendieron que el equipo siempre va encima de cualquier individualidad. Porque no dejaron dudas acerca del enfoque con el que salieron en el quinto juego de las Finales. Porque defendieron fuerte, en conjunto, y cuando los Lakers defienden como deben no hay equipo en la Liga que pueda con ellos.
Las pruebas están a la vista.
Tuvieron que pasar 82 largos partidos de temporada regular y una postemporada completa para encontrar la redención. Aquella noche fatídica en el Banknorth Garden, en la que el equipo angelino salió aplastado a manos de los Celtics, tuvo un tinte negativo en su momento. Pero el tiempo hizo dar vuelta la situación y todo lo malo se volcó en el vaso de la experiencia.
"Se siente como si me hubiese quitado un mono grande y viejo de mi espalda", dijo Bryant al cierre del partido. "Se siente tan bien encontrar este momento. Tratamos de no pensar demasiado, entiendes lo que digo, porque te pones muy ansioso y excitado. Tratas de no pensar en ello, sólo en jugar. Y entonces aparece este momento, en el que piensas en toda la temporada, en lo que tuvimos que pasar para estar aquí... definitivamente esto está al tope de mi lista", sentenció.
Y entonces debemos pensar de qué lista estamos hablando. Hablamos de una selección de trofeos que incluye cuatro campeonatos NBA -este es el primero sin Shaquille O'Neal-, un premio al JMV de la temporada regular en 2008, un premio JMV de las Finales en 2009 y un oro olímpico en Beijing en 2008, encauzando casualmente otro Redeem Team, pero esta vez nacional.
Kobe promedió 30.0 puntos, 5.0 rebotes y 5.0 asistencias por juego, algo que sólo superó Michael Jordan en los Bulls, en tres oportunidades: 1991, 1992 y 1993. Este campeonato sirvió también para que Bryant se coloque quinto entre los mayores anotadores históricos de playoffs (2009, 695), detrás de Shaquille O'Neal (2000, 707), Allen Iverson (2001, 723), Hakeem Olajuwon (1995, 725) y Michael Jordan (1992, 759), y para que Phil Jackson supere a Red Auerbach como entrenador con más títulos en la historia de la NBA: diez.
"Fumaré el cigarro esta noche en memoria de Red", dijo Jackson. "Era un hombre excelente", completó.