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PERDIDA.- Lorenzen Wright, quien promedió ocho puntos en su carrera, fue encontrado muerto el miércoles. |
J.A Adande, ESPN.com.- El mundo la NBA es tan retorcido, sus valores están tan desviados, que a veces los actos más simples pueden parecer extraordinarios. Ese fue el caso cuando Lorenzen Wright se ofreció a llevar a su amigo y colega.
Pero fue ese acto de cortesía, lejos de la imagen normal del egocéntrico atleta profesional, que vino a la mente de Johnny Doyle, cuando se enteró de que Wright fue encontrado muerto el miércoles. Doyle era el entrenador de acondicionado y fuerza de los Clippers cuando Wright jugó por primera vez en la NBA al final de la década de 1990, y cuando Doyle se benefició de la "buena persona" que era Wright de la que tanto hemos escuchado hablar el miércoles. Cuando Doyle destrozó su coche, fue Wright quien pasó una semana llevándolo a las prácticas o cualquier otro lugar donde tenía que ir. Wright tenía un Chevy Tahoe, con el que estaba particularmente encariñado porque su pintura roja era del mismo color que el de su fraternidad de la universidad, Kappa Alpha Psi.
Memorias de un entrenador
El analista de ESPN/ABC, Hubie Brown, que entrenó a Lorenzen Wright durante más de dos temporadas con los Memphis Grizzlies, recuerda a su jugador fallecido.
En mi segunda temporada con el equipo (2004-05), nos ayudó a ganar 50 partidos y llegar a los playoffs por primera vez en la historia de la franquicia. Tenía una gran presencia física, entendía su trabajo, era totalmente profesional y, en nuestro estilo de juego, se destacaba.
Era muy respetado por sus pares debido a su personalidad flexible. Era un hombre optimista, y disfruté mucho de su liderazgo. Era un líder emocional que también podía respaldar lo antemencionado con su juego físico. Nuestros jugadores más jóvenes, incluido Pau Gasol, se alimentaban de este tipo de energía.
Cada individuo en el equipo tenía una función y todos hacían una contribución importante a lo que estábamos haciendo. Pero no puedes hacerlo a menos que puedas sumar rebotes y tener una gran presencia física, y ese era Lorenzen Wright. Debido a su tamaño y resistencia física, su capacidad de defender y anotar en el poste bajo, permaneció en la liga durante 13 años.
Era un buen muchacho. No podría haberlo logrado sin él.
Mi esposa y yo quisiéramos transmitir nuestras condolencias a la ex-esposa y los hijos de Lorenzen, y también a su padre y al resto de su familia.
Después de que Wright dejó a los Clippers para firmar un contrato como agente libre con los Atlanta Hawks, llevaba a Doyle cuando los Clippers iban a Atlanta. Iban a la casa de Wright o salían a cenar. En cualquier lugar, Wright por lo general tenía familiares junto a él.
"Amaba a su familia", dijo Doyle. "Amaba a su papá y a su hermano. Fueron a Los Angeles con él. Recuerdo lo mucho que amaba a su familia. Siempre estaban cerca".
Wright amplió la base de la familia con seis hijos propios. Un séptimo murió a temprana edad. Uno podría pensar que la pérdida de un niño habría sido suficiente tristeza para una familia que ya había tenido que hacer frente a la bala que dejó paralizado al padre de Wright. Ahora, los reportes indican que más balas habrían acabado con la vida de Lorenzen a la edad de 34.
Una desgracia de magnitud excepcional para alguien a quien Doyle consideró un hombre excepcional, uno con el que formó un lazo más estrecho con que la mayoría de los jugadores que trabajó durante el tiempo que pasó con los Clippers desde 1993 hasta 2005. Habían vuelto a conectarse recientemente por medio de Facebook, y de sus breves mensajes Wright todavía parecía ser la misma persona alegre que Doyle recordaba.
Y ahora más adversidad ha llegado al grupo con el que Doyle formó algunos de sus mejores recuerdos. Un porcentaje imposible de creer de las historias más tristes relacionadas con la NBA en los últimos años han surgido del roster de los Clippers de 1996-97.
Malik Sealy tenía 30 años cuando fue asesinado por un conductor borracho cuando regresaba de la fiesta de cumpleaños de Kevin Garnett en la madrugada del 20 de mayo del 2000.
Kevin Duckworth murió de un ataque al corazón a los 44 años el 25 de agosto del 2008.
Rodney Rogers fue paralizado de los hombros hacia abajo en un accidente de moto el 28 de noviembre del 2008.
Dwayne Schintzius padeció de leucemia y necesitó un trasplante de médula ósea para poder liberarse de la enfermedad, según un informe reciente.
Y ahora Wright se ha ido.
Cuando Wright firmó su gran contrato con los Hawks, que inmediatamente duplicó su salario anual, recuerdo que algunos se preguntaban si merecía el dinero tras una temporada en la que promedió 6.6 puntos y 7.5 rebotes por partido. Los que lo conocían -- independientemente si eran viejos amigos de su ciudad natal de Memphis o las personas que habían entrado en su vida más recientemente, como Doyle -- estaban felices por Wright, contentos de ver que una persona buena disfrutaba de una recompensa. El dinero en la NBA, al igual que los parámetros por los que las buenas obras de Wright parecían sobresalir, es relativo. ¿Hay alguien que realmente se merezca múltiples millones de dólares para jugar al básquetbol?
Ahora la pregunta se ha dado vuelta, con un giro trágico que afectó su vida, la que terminó por múltiples disparos. Lo que decimos todos ahora es: ¿Qué pudo haber hecho este hombre para merecer algo así?